jueves, 16 de julio de 2015

Mateo 11, 28-30

En aquel tiempo, exclamó Jesús: «Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré. Cargad con mi yugo y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis vuestro descanso. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera.»

Estudias para tener un pasado. Trabajas para tener un presente. Ahorras para tener un futuro.
Y en el camino... ¿Qué?
Personas que llegan. Otras se van. Alguna permanece.
Padre, madre, hermano, esposa, hija, amigo...
En una mano tu casa, en otra tu trabajo. ¿Qué lugar ocupo yo?
Si soy para ti lo más importante. ¿Por qué sólo te veo cuando cae la tarde? ¿Por qué no compartimos más que un último estertor?
...
¿Eres capaz de vaciar tus manos?
"¿Para qué? Después de todo este esfuerzo..."
Para coger las mías antes de dormir.

oficina, negocio, sillas, área de trabajo

No hay comentarios:

Publicar un comentario